Cafetera automática De’Longhi Perfetto ECAM 23.460.SB
Es una cafetera superautomática con molinillo integrado y sistema de leche automático pensada para quien quiere espresso y bebidas con leche pulsando un botón. Prepara espresso, café largo y capuchinos con una crema generosa y una textura estable, manteniendo un manejo sencillo gracias a un panel con texto y botones claros. El depósito es amplio y extraíble, la unidad de preparación se desmonta para limpiar y cuenta con enjuagues y descalcificación programados que reducen la carga de mantenimiento. Para el café, admite grano y también café molido en un conducto dedicado, útil para variedades descafeinadas. El espumador automático LatteCrema facilita capuchinos consistentes y también puede espumar de forma manual con la varilla cuando apetece ajustar al gusto. La construcción es sólida, con acabados que resisten bien el uso diario. No todo es magia: el molinillo agradece granos naturales y un punto de molienda medio para evitar atascos, y la salida de leche está pensada para tazas no muy altas. ¿Buscas rutina de barista sin complicarte? Aquí encaja. Tip: si cambias de mezcla, purga dos espressos para igualar el sabor. Lama-truco: usa granos de tueste natural y evita torrefacto para mantener el molinillo fino.
- Espresso con cuerpo y crema estable. La máquina saca un café aromático con buena textura, y el sistema de leche automátizado logra una espuma densa y homogénea. Resultado consistente. Ojo: un pequeño purgado mejora el primer café del día.
- Manejo sencillo desde el primer día. El panel con texto y botones guía bien, sin menús enrevesados, y las recetas rápidas evitan la curva de aprendizaje. Se siente intuitiva.
- Limpieza con poco drama. Enjuagues automáticos, descalcificación guiada y grupo extraíble hacen el mantenimiento más llevadero, con menos “rituales” y más café. La cafetera te avisa cuando toca.
- LatteCrema bien afinado. Los capuchinos salen con espuma consistente y aspecto de cafetería, sin adivinar tiempos. Cuando quieras más control, la varilla manual te deja jugar.
- Personalización de leche limitada en recetas automáticas: no siempre deja ajustar con precisión la cantidad o la temperatura de la leche. Puedes usar la varilla manual cuando busques ese punto “barista” más fino.
- Boquilla de leche baja para tazas altas: con vasos grandes la salida queda justa y toca usar recipientes medianos. Un vaso bajo o una jarrita metálica lo resuelven con estilo.
- Molinillo sensible a granos torrefactos: con mezclas azucaradas o muy finas puede atascarse. Opta por tueste natural y sube un clic la molienda si notas resistencia.
- Gasta agua en los enjuagues: los ciclos automáticos suman pasadas. Coloca un recipiente durante los enjuagues y reutiliza para plantas o para limpiar la bandeja de goteo.
- Espresso aromático y estable.
- Espuma de leche consistente con LatteCrema.
- Manejo intuitivo con panel claro.
- Mantenimiento guiado y grupo extraíble.
- Ajustes finos de leche limitados en automáticas.
- Boquilla de leche poco cómoda para vasos altos.
- Molinillo quisquilloso con torrefacto y molienda muy fina.
Si te gusta empezar el día con un espresso con “cuerpo de cafetería” y quieres capuchinos sin jugar a la lotería, esta máquina encaja como un guante. Es para quien valora pulsar y disfrutar, sin renunciar a toques de control cuando apetece ajustar la molienda o usar la varilla. También funciona para casas con gustos mixtos: grano para el café de diario y, de vez en cuando, una cucharada de molido para un descafeinado puntual. Orden en la encimera, café con carácter y una rutina que no exige pensar demasiado. Tip: deja el vaso bajo preparado y purga un segundo cuando cambies de mezcla; la consistencia lo agradecerá. Si sueles usar vasos altos, una jarrita espumadora te hará la vida fácil. ¿Y si hoy te das ese capricho de espuma perfecta? Lama-truco: tras espumar, gira a “clean” y aclara el sistema al momento; así la espuma se mantiene top sin sorpresas.
En el día a día ofrece café con aroma y espuma consistente, manejo claro y mantenimiento guiado; el modo automático resuelve mañanas con prisa y la varilla manual te deja afinar cuando te apetece jugar. Si la leche te gusta muy caliente o usas vasos altos, prueba este Lama-truco: espumar en jarrita y servir después al vaso. ¿Para qué seguir comparando mañana si hoy puedes decidir y volver al café? Decidir hoy te ahorra vueltas y mantiene el foco en lo que importa. Ver precio y disponibilidad haciendo click en el botón «Ver Producto».



